El Senado argentino vivió una jornada tumultuosa eyer miércoles, marcada por la aprobación de las reformas económicas propuestas por el presidente Javier Milei, conocidas como Leyes de Bases para la Libertad de los Argentinos. Mientras los senadores debatían y votaban las medidas legislativas que prometen transformar el modelo económico del país, las calles de Buenos Aires se convirtieron en escenario de violentos incidentes entre manifestantes y fuerzas policiales.
El presidente Milei argumenta que estas reformas son esenciales para revitalizar la economía nacional mediante la reducción del peso del Estado y la incentivación de la inversión privada. Sin embargo, sus opositores, incluyendo partidos políticos, sindicatos y organizaciones de izquierda, acusan al gobierno de intentar desmantelar los servicios públicos y de implementar medidas de ajuste que afectarán negativamente a la población.
El paquete legislativo, que fue aprobado con el voto decisivo de la vicepresidenta Victoria Villarruel, ahora debe regresar a la Cámara de Diputados para su sanción final, luego de que los senadores introdujeran algunas modificaciones durante el debate.
Las manifestaciones en las cercanías del Congreso fueron intensamente confrontativas, resultando en numerosos heridos y detenidos según informes del diario Clarín. Las fuerzas policiales respondieron con gases lacrimógenos y cañones de agua para dispersar a los manifestantes, quienes lanzaron objetos contundentes en respuesta.
El gobierno condenó enérgicamente las protestas, describiéndolas como un “intento de golpe de Estado”, y elogiando la actuación de las fuerzas de seguridad en la contención de los disturbios.