La Plaza de España en Sevilla, un monumento declarado Bien de Interés Cultural (BIC), se encuentra en el centro de la polémica tras la propuesta del alcalde, José Luis Sanz (PP), de implementar un pago para acceder a este icónico lugar. La Consejería de Turismo, Cultura y Deporte, dirigida por Arturo Bernal, subraya que la Plaza de España es un monumento y no una calle ni una avenida, gozando así de la máxima protección.
Fuentes de la Consejería han señalado que la iniciativa del alcalde requiere la aprobación de varias administraciones, dado que múltiples entidades participan en la titularidad del entorno. A pesar de las diferencias de opinión, se destaca que la Plaza de España siempre ha sido considerada una joya que merece ser preservada.
Desde la Junta, se reconoce el conocimiento del alcalde sobre la ciudad y su interés en cuidar este monumento. Aunque el acceso podría tener un costo para los turistas, se asegura que los sevillanos mantendrían su acceso gratuito.
El proyecto municipal propone cobrar una entrada para los visitantes, con el objetivo de financiar un servicio de vigilancia las 24 horas y establecer un taller de restauración permanente para garantizar el mantenimiento continuo de la Plaza de España. Esta medida se incluirá en un convenio de colaboración que el alcalde presentará a la Dirección General de Patrimonio del Estado del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, buscando la cesión de uso de determinados espacios en el conjunto monumental para su gestión cultural turística.