- Macron advierte sobre la agresividad de la nueva doctrina nuclear rusa y su impacto global.
- Critica la participación de tropas norcoreanas como una escalada peligrosa en el conflicto.
- Pide a China intervenir para detener las acciones militares de Rusia.
El presidente francés, Emmanuel Macron, instó el martes a su homólogo ruso, Vladímir Putin, a reconsiderar su decisión de permitir el uso de armas nucleares como respuesta a ataques convencionales que pongan en riesgo la soberanía de Rusia y Bielorrusia.
“Es una postura muy agresiva hacia toda la comunidad internacional (…) Rusia se está posicionando como un agente desestabilizador a nivel global. Hago un llamado al presidente Putin para que modere su postura”, expresó Macron tras concluir el G20 en Río de Janeiro.
Las declaraciones del mandatario francés surgieron tras la confirmación del Ministerio de Defensa ruso sobre el uso de misiles balísticos ATACMS, suministrados por Estados Unidos, en un ataque ucraniano contra una instalación militar en territorio ruso.
Macron, quien previamente había respaldado la utilización de este tipo de armamento por parte de Ucrania, enfatizó que su objetivo es promover la paz, pero sin aceptar concesiones territoriales de Kiev a Moscú.
Inquietud por tropas norcoreanas
El presidente francés también expresó su preocupación por el apoyo militar de tropas norcoreanas a Rusia, lo que calificó como un paso adicional en la escalada del conflicto. Según Macron, esta actitud belicosa de Moscú se ha intensificado en los últimos días.
“Queremos una paz que no implique una capitulación, ya que eso legitimaría la ley del más fuerte”, afirmó. Además, reveló que, durante el G20, mantuvo conversaciones con el presidente chino, Xi Jinping, a quien pidió utilizar su influencia para persuadir a Putin de cesar las hostilidades.
Por su parte, Putin formalizó este martes una reducción en el umbral para el uso de armas nucleares, una decisión que sigue al reciente aval de Estados Unidos para que Ucrania utilice misiles de largo alcance contra objetivos dentro del territorio ruso.
La nueva política rusa permite una respuesta nuclear incluso frente a ataques convencionales respaldados por una potencia nuclear, lo que eleva significativamente las tensiones globales.