- Daniel Ortega apoya las recientes declaraciones de Lula, destacando que cada país debe decidir sobre sus propios asuntos sin interferencias externas.
- El presidente de Nicaragua subraya la importancia de no involucrarse en los conflictos internos de otras naciones, en particular Venezuela.
- Ortega recuerda que nunca ha intervenido en los asuntos internos de Brasil y que siempre ha respetado su soberanía.
Daniel Ortega celebró este lunes las declaraciones de Luiz Inácio Lula da Silva, quien afirmó que la situación de Venezuela es un asunto interno de ese país. Durante la Cumbre Empresarial China-América Latina y el Caribe, Ortega apoyó a Lula y resaltó que ‘lo que decida Venezuela debe ser respetado’. Comparó la situación con un conflicto de vecinos, destacando que “los pleitos los resuelven entre ellos, no con la intervención de otros”. De esta manera, reafirmó su postura de no intervenir en los asuntos internos de otros países.
Lula también había señalado en una entrevista que “Maduro es un problema de Venezuela, no de Brasil”, dejando claro que su responsabilidad es con Brasil y no con los conflictos externos. Ortega, por su parte, recordó que su gobierno ha seguido siempre un principio de no intervención. En ese sentido, resaltó que nunca se ha entrometido en los asuntos de Brasil, más allá de expresar solidaridad en momentos difíciles, como cuando encarcelaron a Lula o destituyeron a Dilma Rousseff.
Ortega reafirma su respeto por la soberanía de cada nación
El presidente de Nicaragua también enfatizó que el respeto por la soberanía de cada nación es fundamental. “Los Estados son como una familia, y nadie debe decirles lo que deben hacer”, aseguró Ortega. Así, reiteró que su gobierno se rige por principios de respeto y no intervención, lo que se refleja en sus relaciones con otros países de América Latina, incluyendo Brasil.
A pesar de las tensiones previas entre ambos gobiernos, Ortega expresó sus mejores deseos para Lula y su partido, el Partido de los Trabajadores. Destacó que, aunque hayan tenido diferencias, su gobierno continuará promoviendo el respeto mutuo y la soberanía de cada nación, principios que, según él, deben prevalecer en la diplomacia internacional.