La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) votó con ocho votos a favor y tres en contra para analizar la reforma judicial. Este análisis surge a partir de solicitudes hechas por magistrados y jueces federales que buscan frenar la implementación de la reforma.
La ministra Lenia Batres Guadarrama expresó su rechazo a esta decisión, afirmando que someter la reforma al poder judicial a revisión es un intento de “golpe de Estado”. Según Batres, la Corte está interviniendo en un proceso de reforma que debería estar en manos del poder constitucional reformador, no bajo control de la Corte.
Además, Lenia Batres calificó la aceptación de esta queja como un “ataque político”, advirtiendo que la Corte estaría violando la supremacía constitucional y la división de poderes al asumir competencias que no le corresponden. Citó el artículo 39 de la Constitución, recordando que el poder público emana del pueblo y está para servirle, permitiéndole cambiar su forma de gobierno cuando sea necesario.
Finalmente, la ministra destacó que la responsabilidad de la SCJN es garantizar el control constitucional, pero solo dentro de las funciones que la Constitución le otorga.
Reacciones del Poder Judicial
Trabajadores del Poder Judicial celebraron la decisión de la SCJN de revisar la reforma al poder judicial. Con carteles y consignas, reconocieron la votación de 8 a 3 como una victoria para la independencia judicial.
El ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá propuso admitir la consulta de los jueces, argumentando que la Corte tiene el deber de proteger la independencia del Poder Judicial.
Uno de los trabajadores comentó: “Que se escuche claramente, en el Palacio Nacional y en el Congreso: hay República gracias a las ministras y ministros que defienden el Estado de Derecho y la división de poderes. México no es propiedad de ningún partido o grupo”.