El avance de la inteligencia artificial (IA) plantea preguntas sobre el futuro del empleo. Según una encuesta del Boston Consulting Group, el 42% de los empleados temen perder sus trabajos en la próxima década debido a la automatización.
Elon Musk, en la Conferencia Internacional sobre Seguridad de la IA en Milton Keynes, Inglaterra, destacó que, aunque la IA transformará muchas funciones laborales, sectores como la medicina seguirán necesitando habilidades humanas para la toma de decisiones y el cuidado personalizado.
En eventos como VivaTech 2024 en París, Elon Musk reiteró la importancia de prepararse para un futuro donde la IA y los robots podrían manejar tareas rutinarias, mientras que los trabajos “opcionales” podrían ser más comunes como actividades personales.
Propuso la idea de una “renta básica universal” como posible solución para mitigar los efectos económicos de la automatización masiva.
A pesar de estos avances, estudios como los del Laboratorio de Ciencias de la Computación e Inteligencia Artificial del MIT indican que la implementación de la IA en el lugar de trabajo está siendo más gradual de lo previsto, enfocándose principalmente en roles no económicamente viables para la automatización.