- El comisionado estatal de seguridad desmiente secuestro exprés y revela detalles sobre la desaparición del obispo de Chilpancingo.
El comisionado estatal de seguridad, José Antonio Ortiz Guarneros, desestimó la posibilidad de un secuestro exprés en el caso del obispo de la diócesis de Chilpancingo, Monseñor Salvador Rangel Mendoza.
Según Ortiz Guarneros, las evidencias recabadas hasta el momento indican que el obispo ingresó voluntariamente a un motel acompañado por otra persona del mismo sexo, quien luego se retiró. Esta información fue entregada a la fiscalía para su investigación.
Ortiz Guarneros enfatizó que no se disponen de más detalles debido a que, al recolectar información, la Fiscalía General del Estado asumió el control de la escena. Además, criticó a quienes intentan politizar el caso para desacreditar el trabajo de seguridad en el estado.
El secretario de gobierno en funciones de gobernador, Samuel Sotelo Salgado, también cuestionó la teoría del secuestro exprés, revelando que el obispo fue visto por última vez en una pizzería, donde se reunió con un trabajador del establecimiento. Aunque se realizaron retiros de cajeros automáticos, no hay evidencia visual de que el obispo haya sido privado de su libertad.
Monseñor Salvador Rangel Mendoza fue reportado desaparecido el 27 de abril y posteriormente encontrado en un hospital de Cuernavaca el 29 de abril. Según informes médicos, se detectaron sustancias como cocaína y benzodiacepinas en su cuerpo. Se espera que el obispo proporcione más detalles sobre su experiencia una vez que esté en condiciones de hacerlo.
