Wall Street finalizó noviembre con una notable alza, impulsada por la victoria del expresidente Donald Trump en las elecciones de EE. UU. y las expectativas de los inversores sobre sus políticas económicas en su próxima administración.
El Dow Jones subió un 6,34 %, alcanzando los 44.910 puntos; el S&P 500 avanzó un 3,42 % hasta los 6.032 puntos, y el Nasdaq creció un 2,7 %, ubicándose en los 19.218 puntos.
Los analistas señalan que la principal causa de este repunte fue la elección de Trump el 5 de noviembre, lo que generó optimismo en los mercados debido a sus promesas de reducir impuestos y eliminar regulaciones. A pesar de las preocupaciones sobre sus planes proteccionistas, como los aranceles a las importaciones, los inversores confían en la selección de Scott Bessent como secretario del Tesoro.
El índice Russell 2000, compuesto por pequeñas empresas, destacó con una subida del 8,79 % este mes, reflejando el impacto positivo del “efecto Trump”. Tesla, con el apoyo de Elon Musk, quien será parte del futuro gobierno, vio un aumento de su valor en un 33 %.
Los sectores de consumo, financiero e industrial fueron los más beneficiados, con subidas de 9,89 %, 9,82 % y 5,60 %, respectivamente, mientras que el sector salud descendió un 1,29 %. Las grandes tecnológicas, conocidas como las “Siete Magníficas”, tuvieron un rendimiento más moderado debido a grandes gastos y la preocupación por una posible burbuja; Nvidia, por ejemplo, perdió un 2,1 %.
Los inversores siguen atentos a las decisiones de la Reserva Federal, que podría reducir las tasas de interés en su reunión de diciembre. Aunque los últimos datos sobre el PIB y la inflación no sorprendieron, algunos expertos temen que el estancamiento económico podría retrasar las bajadas de tipos.
En otros mercados, el petróleo de Texas cayó un 7 %, mientras que el bitcóin, impulsado por la percepción de una postura más flexible de Trump hacia las criptomonedas, se acercó a los 100.000 dólares.