El UNICEF ha alertado sobre la persistente falta de atención a niños y adolescentes en Acapulco, cinco meses después de la devastación causada por el huracán Otis.
Según el organismo, las necesidades humanitarias siguen siendo significativas, con situaciones que ponen en riesgo la integridad y el bienestar de los niños, particularmente en áreas como educación, salud, nutrición, agua, saneamiento, higiene y protección.
En el ámbito educativo, aunque la mayoría de las escuelas han reanudado clases, muchas continúan enfrentando necesidades como la falta de infraestructura básica y materiales escolares.
Además, persiste un aumento en los casos de dengue y violencia de género, con la violencia contra mujeres y niñas en aumento, especialmente en áreas marginadas de la ciudad.
UNICEF ha puesto en marcha un plan de acción para abordar estas necesidades, aunque el progreso ha sido limitado en áreas como salud, nutrición y prevención del abuso sexual.
La situación se agrava por la escasez de mano de obra en la industria de la construcción, lo que dificulta la rehabilitación de la infraestructura y contribuye al malestar social en la región