- Más de 3.300 personas fueron evacuadas por un incendio forestal en Ofunato, Japón.
- El fuego ha destruido al menos 80 hogares y ha quemado más de 600 hectáreas de bosque.
- Las autoridades locales y fuerzas militares continúan las labores de extinción mientras se teme que el número de víctimas aumente.
Un incendio forestal declarado en la ciudad de Ofunato, en el noreste de Japón, ha provocado la muerte de al menos una persona y la destrucción de más de 80 viviendas. Además, más de 3.300 residentes han tenido que ser evacuados mientras los bomberos y personal militar luchan por controlar las llamas.
El fuego comenzó a primera hora de la tarde del miércoles en un cobertizo de trabajo, y rápidamente se propagó hacia una zona boscosa, donde las condiciones de aire seco han favorecido su expansión. La alerta por tiempo seco ha estado en vigor desde el 18 de febrero, lo que ha contribuido a la rápida propagación del fuego.
Este es el tercer incendio que afecta la región en menos de una semana. Hasta el momento, el fuego ha destruido más de 600 hectáreas y se ha extendido por varias localidades costeras de la prefectura de Iwate, donde se encuentra Ofunato.
A pesar de los esfuerzos de los bomberos y de las unidades de las Fuerzas de Autodefensa de Japón, que se unieron a las labores de extinción esta mañana, la propagación del incendio se ha visto dificultada por los fuertes vientos. La Agencia de Gestión de Incendios y Desastres ha solicitado el apoyo de 680 efectivos de bomberos provenientes de seis prefecturas cercanas.
Víctimas de incendio
Las autoridades locales han confirmado la presencia de un cadáver calcinado en la zona afectada, y han informado que 84 viviendas y bloques residenciales han quedado dañados. Se espera que el número de hogares afectados aumente conforme continúan las inspecciones. El gobierno central se ha comprometido a coordinarse con las autoridades locales para proporcionar la ayuda necesaria.
Además de los daños materiales, el incendio ha dejado sin electricidad a 500 hogares y ha afectado el servicio ferroviario local. Las escuelas y guarderías cercanas a la zona de emergencia han cerrado, y las autoridades siguen evaluando los posibles heridos o víctimas adicionales.
El pronóstico meteorológico no prevé lluvias en la zona en los próximos días, lo que mantiene vigente la alerta por tiempo seco.
