En medio de la controversia desatada por la ley de Arizona que prohíbe casi todos los abortos, Donald Trump expresó el miércoles su opinión, señalando que la medida legislativa “va demasiado lejos”. El expresidente instó a los legisladores del estado a reconsiderarla, al tiempo que respaldó la reciente decisión de la Corte Suprema de anular el derecho constitucional al aborto.
“Se va a enderezar todo y, como cabe, se trata de los derechos de los estados”, declaró Trump a simpatizantes y periodistas tras llegar a Atlanta para un evento de recaudación de fondos. “Estoy seguro de que el gobernador y cualquier otra persona entrarán en razón y resolverán eso muy rápido”.
Trump, cuya postura sobre el aborto ha sido objeto de atención, recientemente publicó un video en el que se niega a respaldar una prohibición nacional del aborto, destacando que estas decisiones incumben a cada estado. Este posicionamiento ha generado descontento entre los conservadores religiosos y ha avivado el ánimo de los aliados del presidente Joe Biden, quienes consideran este tema como uno de los puntos débiles de Trump.
El fallo de la Corte Suprema de Arizona, emitido el martes, allanó el camino para la implementación de una ley de 1864 que prohíbe el aborto en todas las etapas del embarazo, sin excepciones para casos de violación o incesto.
Trump manifestó su satisfacción por el respaldo de los tres magistrados de la Corte Suprema de Estados Unidos, nombrados por él, quienes votaron a favor de anular el fallo de Roe vs. Wade de 1973, señalando que los estados tendrán distintas restricciones. No obstante, respalda tres excepciones: violación, incesto y riesgo para la vida de la madre.
El expresidente también mencionó la ley de Florida, que prohíbe los abortos después de las seis semanas de embarazo, sugiriendo que “probablemente también va a cambiar”.
Al abordar la voluntad popular, Trump recordó que durante 52 años hubo un deseo de revocar el fallo Roe vs. Wade para que la regulación del aborto volviera a ser competencia de los estados. “Logramos eso. Fue algo increíble, un logro asombroso”, afirmó. “Ahora los estados tienen el control y están implementando lo que consideran adecuado. Es la voluntad del pueblo. Así que probablemente Florida tendrá que hacer ajustes”.
Trump evitó responder preguntas sobre su posición respecto a una enmienda constitucional estatal pendiente en Florida que garantizaría el acceso al aborto como un derecho de los residentes del estado. No ofreció detalles adicionales sobre su visión en cuanto al nivel de restricciones y acceso en Arizona o en cualquier otro estado.