- Toraji tocó tierra en la provincia de Aurora, al norte del país, este lunes.
- Miles de personas fueron evacuadas de zonas vulnerables a inundaciones y deslizamientos.
- El país sigue en alerta por la posible llegada de otros dos ciclones esta semana.
Este lunes, el tifón Toraji tocó tierra en la provincia de Aurora, al norte de Filipinas, después de que las autoridades ordenaran la evacuación de miles de personas de zonas en riesgo debido a las intensas lluvias y fuertes vientos. El tifón, que trae vientos sostenidos de hasta 130 km/h y ráfagas de hasta 160 km/h, alcanzó la costa cerca de Dilasag a las 8:10 hora local (12:10 GMT). La Agencia Meteorológica de Filipinas (Pagasa) señaló que Toraji avanzará a lo largo de la isla de Luzón, perdiendo fuerza hasta convertirse en una tormenta tropical severa.
Pagasa anticipa que Toraji seguirá debilitándose y se convertirá en una baja remanente mientras avanza hacia el mar, cerca del sur de China. Las autoridades continúan en alerta debido a la formación de otros dos ciclones tropicales que podrían afectar el archipiélago en los próximos días. El país ha sufrido varios tifones en el último mes, que dejaron más de 150 muertos, lo que aumenta la preocupación de las autoridades.
Evacuaciones masivas por el impacto de Toraji
Para mitigar los riesgos de Toraji, el gobierno filipino evacuó a 2.500 comunidades que podrían enfrentar inundaciones o deslizamientos de tierra. El secretario de Interior, Jonvic Remulla, destacó que el país se mantiene vigilante ante la formación de nuevos ciclones. Pagasa informó que uno de estos ciclones está a unos 1.480 km al este de las Islas Bisayas y podría alcanzar la categoría de tifón el miércoles, con posibilidad de tocar tierra a finales de semana.
Este tifón llega justo después de que el tifón Yinxing golpeara la zona norte de Filipinas el jueves pasado, afectando a unas 261.000 personas y dejando un desaparecido. Además, entre finales de octubre y principios de noviembre, los tifones Trami y Kong-Rey dejaron 158 muertos y más de 130 heridos. Filipinas, que enfrenta entre 15 y 20 tifones al año, sigue sufriendo los efectos de la temporada de lluvias, que suele empezar en junio y concluir entre noviembre y diciembre.