- Siete personas, incluyendo tres niños, han fallecido en un reciente ataque ruso con misiles a Leópolis, Ucrania.
- El presidente Volodímir Zelenski solicita el uso de armamento de largo alcance para contrarrestar estos ataques desde su origen.
- El Ejército ucraniano reporta bajas significativas en un ataque separado en Poltava y Rusia denuncia una mayor implicación de EE.UU. en el conflicto.
Un ataque con misiles rusos en Leópolis, Ucrania, durante la madrugada del miércoles, ha dejado un saldo trágico de siete muertos, entre ellos tres niños, según el alcalde Andrí Sadoví. Inicialmente, el presidente ucraniano Volodímir Zelenski había reportado cinco víctimas fatales, incluyendo una menor de 14 años. El ataque también ha causado daños significativos en edificios residenciales, escuelas e infraestructuras médicas.
Zelenski ha solicitado a los aliados internacionales que proporcionen armamento de largo alcance para poder contrarrestar estos ataques desde su origen. En otro incidente, el Ejército ucraniano confirmó al menos 53 muertos en un ataque ruso con misiles balísticos contra el Instituto Militar de Comunicaciones en Poltava, una ciudad en el centro de Ucrania.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, ha criticado el creciente involucramiento de Estados Unidos en el conflicto ucraniano, sugiriendo que no hay indicios de que esta tendencia vaya a cambiar. Por su parte, el presidente ruso Vladímir Putin realizó una inspección de la Flota del Pacífico en Vladivostok, tras su visita a Mongolia, donde no se cumplió una orden de arresto emitida por la Corte Penal Internacional.
Además, Rusia llevó a cabo un ataque masivo utilizando 13 misiles y 29 drones kamikaze, en su mayoría dirigidos contra el oeste de Ucrania. Las defensas aéreas ucranianas lograron interceptar varios proyectiles, aunque algunos misiles, incluidos los Kinzhal y los Iskander-M, no pudieron ser detenidos.