Montgomery, Alabama – Este miércoles, un juez dictaminó que Alabama podrá llevar a cabo la ejecución de un recluso mediante el uso de nitrógeno, allanando el camino para la implementación por primera vez en Estados Unidos de un método de pena capital que los abogados del preso consideran cruel y experimental.
El juez R. Austin Huffaker rechazó la solicitud del recluso, Kenneth Eugene Smith, de suspender la ejecución programada para el 25 de enero. Los abogados de Smith alegan que el juez está convirtiendo al preso en un “sujeto de experimento” para un método de ejecución que nunca se ha probado. Se espera que apelen la decisión, y el asunto podría llegar a la Corte Suprema.
El método implica colocar una máscara tipo respirador sobre la nariz y la boca del recluso, sustituyendo el aire respirable por nitrógeno, lo que provocaría la muerte por falta de oxígeno. Tres estados: Alabama, Mississippi y Oklahoma, han autorizado este método de ejecución, pero hasta la fecha, ninguno lo ha llevado a cabo.
Smith, actualmente con 58 años, fue condenado por el asesinato de la esposa de un predicador en una pequeña comunidad del norte de Alabama en 1988. Según la fiscalía, Smith y otro hombre recibieron mil dólares cada uno por matar a Elizabeth Sennett para beneficiar al esposo, quien estaba endeudado y quería cobrar el seguro.
Smith sobrevivió a un intento previo de ejecución en 2022, cuando el Departamento Correccional de Alabama intentó usar la inyección letal, pero el procedimiento fue cancelado debido a problemas técnicos.
La decisión del juez de permitir la ejecución mediante nitrógeno surge después de una audiencia judicial en diciembre y varios registros legales en los que los abogados presentaron argumentos divergentes sobre los riesgos y la humanidad de aplicar la pena de muerte con nitrógeno. El despacho del procurador general de Alabama, Steve Marshall, argumentó que la privación de oxígeno “causa inconsciencia en pocos segundos y muerte en pocos minutos”, comparándola con accidentes industriales en los que personas murieron al inhalar nitrógeno. Sin embargo, los abogados de Smith plantearon incertidumbres y posibles problemas que podrían violar la prohibición constitucional de un castigo cruel e inusual.