Rusia ha atacado la región de Járkov, en el este de Ucrania, con bombas aéreas guiadas, provocando grandes daños en infraestructuras clave. Según el jefe de la Administración Militar Provincial, Oleg Sinegúbov, el bombardeo afectó a una institución educativa, una residencia universitaria y un edificio residencial.
Afortunadamente, no se reportaron víctimas humanas, pero sí se produjeron incendios en dos autobuses, un camión y un automóvil.
El alcalde de Járkov, Igor Terejov, ha afirmado que Rusia está utilizando nuevas armas, de mayor alcance, para atacar la ciudad, que ha sido objeto casi a diario de bombardeos rusos. A pesar de esto, las tropas rusas no se han acercado más a la ciudad, donde actualmente viven 1,3 millones de ucranianos, muchos de los cuales se han desplazado de otras regiones cercanas al frente.
Terejov reconoció que la infraestructura energética de la ciudad ha sido casi completamente destruida y que la infraestructura privada también ha sufrido daños. Sin embargo, tanto la