- Una investigación de MCCI señala que Saúl Vera Ochoa, empresario de Tabasco, recibió la concesión del muelle 289 en Tampico.
- El puerto fue señalado como punto de arribo de buques con combustible robado.
- Testimonios ante la FGR revelan una red de sobornos por millones de pesos.
Concesión en el puerto de Tampico
El muelle fiscal 289 del puerto de Tampico, investigado por operaciones con buques huachicoleros, fue concesionado en 2020 a Tampico Terminal Marítima S.A. de C.V., empresa propiedad del tabasqueño Saúl Vera Ochoa. La compañía fue creada en junio de ese año, el mismo mes en que obtuvo la autorización oficial.
La sociedad está conformada por cuatro empresas de Tabasco: Constructora Veasa, Multiservicios RYC, Acuitab y VOS Grupo Constructor. En todas ellas, Vera Ochoa y su familia han ocupado cargos como accionistas o administradores. Una de estas firmas, Acuitab, fue constituida en la notaría donde trabajaba Adán Augusto López Hernández antes de ocupar cargos políticos.
Vínculos políticos
Saúl Vera Ochoa es identificado como cercano al grupo político de Tabasco y, en 2022, expresó públicamente su apoyo a la candidatura presidencial de Adán Augusto López. En declaraciones a un medio local aseguró que tener a un tabasqueño en Palacio Nacional sería un beneficio para el país y para la continuidad de la Cuarta Transformación.
Testimonio sobre sobornos
El ex titular de la Aduana de Tampico, Capitán Alejandro Torres Joaquín, hoy testigo protegido de la FGR, declaró que recibió 1.7 millones de pesos por cada buque con combustible ilegal que ingresó al muelle 289. Según su relato, acudió al menos en 13 ocasiones a recoger los pagos en oficinas de la Plaza Laguna.
En ese lugar coincidía con Antonio Dávila Capiterucho, administrador único de Tampico Terminal Marítima y socio de Vera Ochoa. Capiterucho fue gerente en la Comisión Nacional del Agua hasta 2015 y, de acuerdo con los testimonios, era el encargado de recibir los sobornos destinados al concesionario del muelle.
