- La Fiscalía de Guanajuato investiga la posible venta ilegal de alcohol y drogas en el negocio atacado en Apaseo el Grande.
- Ocho personas, incluidos dos bomberos y un paramédico, fueron asesinadas en un tiroteo en Apaseo el Grande.
- Las autoridades llaman a mejorar la supervisión de establecimientos y combatir actividades ilícitas.
La masacre ocurrida la noche del sábado en Apaseo el Grande, Guanajuato, donde un comando armado asesinó a ocho personas, ha generado preocupación en la comunidad. La Fiscalía Estatal investiga si el establecimiento atacado estaba vinculado a actividades ilegales, específicamente a la venta de drogas y alcohol.
El secretario de Seguridad y Paz del estado, Juan Mauro González, detalló que esta es una de las principales líneas de investigación. En una entrevista, calificó el ataque como un acto cobarde y aseguró que las autoridades tienen pistas que podrían llevar a la captura de los responsables. También hizo un llamado a los municipios a supervisar los lugares donde se venden bebidas alcohólicas para evitar que se utilicen para actividades delictivas.
Entre las víctimas se encuentran dos bomberos y un paramédico del Sistema de Urgencias del Estado de Guanajuato (SUEG), lo que ha conmocionado a la comunidad, dado el impacto sobre el personal de emergencias.
La masacre tuvo lugar cuando un grupo armado irrumpió en un local donde varios consumidores de alcohol estaban reunidos. Las autoridades continúan investigando los detalles del ataque y reafirmaron su compromiso con la justicia.
El secretario de Seguridad estatal también destacó la importancia de un control más riguroso de los negocios que operan en la región. Llamó a los gobiernos municipales a garantizar que estos establecimientos cumplan con las normativas legales.
Avanzando en la investigación, González indicó que este lunes se llevarían a cabo nuevas diligencias en Apaseo el Grande. Aunque reconoció la gravedad del ataque, destacó que en noviembre se han registrado menos homicidios, lo que refleja avances en la seguridad en la región.
La población exige justicia para las víctimas y mayor control en los negocios involucrados en actividades ilícitas. Las autoridades trabajan de manera coordinada en la resolución del caso y en la prevención de futuros incidentes.