- La moneda nacional registra variaciones leves en un mercado atento a las señales sobre la posible reducción de la tasa de interés por parte de la Reserva Federal.
- Expertos destacan incertidumbre sobre futuros movimientos de la Fed en cuanto a tasas de interés y la fortaleza económica de EE. UU.
Persiste Estabilidad en el Tipo de Cambio
La mañana de este viernes, el peso mexicano muestra una ligera recuperación frente al dólar en un contexto de cautela en el mercado, que busca anticipar posibles movimientos de la Reserva Federal respecto a las tasas de interés.
El tipo de cambio spot se sitúa en 16.7230 unidades por dólar, mostrando una mínima ganancia de un centavo (0.06%) en comparación con el cierre oficial de ayer, según datos del Banco de México (Banxico).
Análisis del Comportamiento
En el día, el valor del dólar se mantiene dentro de un rango estrecho, alcanzando un máximo de 16.7625 pesos y un mínimo de 16.6790 pesos. Por su parte, el Índice Dólar (DXY) del Intercontinental Exchange, que evalúa la fortaleza del dólar frente a otras seis monedas, experimenta una caída del 0.32% a 104.77 unidades.
Georgina Muñiz, analista de Vector Casa de Bolsa, señala que “los indicadores a corto plazo sugieren la posibilidad de una continuación en la depreciación, aunque se identifica una resistencia clave en 16.8, la cual podría frenar el avance”.
Incógnitas sobre Política Monetaria
La incertidumbre persiste en torno a los próximos movimientos de la Reserva Federal en cuanto a las tasas de interés. Expertos de CIBanco enfatizan que “las grandes interrogantes son cuándo se reducirán las tasas y a qué ritmo lo hará”.
Se destaca también el repunte en los nuevos pedidos de bienes duraderos en Estados Unidos durante abril, superando las expectativas. Este dato se suma a las señales de fortaleza económica en EE. UU. y a la posibilidad de mantener una inflación elevada.
Se destaca también el repunte en los nuevos pedidos de bienes duraderos en Estados Unidos durante abril, superando las expectativas. Este dato se suma a las señales de fortaleza económica en EE. UU. y a la posibilidad de mantener una inflación elevada.