Este martes, periodistas de Morelos se reunieron por tercer día consecutivo para exigir justicia por el secuestro y asesinato de su colega Roberto Carlos Figueroa en Coajomulco, Huitzilac. Con un bloqueo de calles en el centro histórico de Cuernavaca y gritos de “¡cobardes!”, lograron que el secretario de gobierno en funciones de gobernador, Samuel Sotelo, accediera a una audiencia.
Desde temprano, reporteras y reporteros se congregaron en la Ofrenda de Víctimas frente al Palacio de Cortes para solicitar una reunión con Sotelo y pedir medidas de seguridad que garanticen la libertad de expresión, además de detener la filtración de información relacionada con las investigaciones del caso.
Tras varios minutos de bloqueo y exigencias de justicia, los comunicadores aumentaron su indignación cuando los funcionarios de la subsecretaría de gobierno intentaron dialogar.
En la reunión con Sotelo y autoridades de la Secretaría de Gobierno, los periodistas expusieron la necesidad de establecer condiciones de seguridad para ejercer el periodismo y activar un protocolo emergente para casos de comunicadores en riesgo, debido a la ineficacia del actual.
Margarito Pérez Retana, fotoperiodista de la Revista Proceso y la agencia Cuatoscuro, expresó la indignación de los periodistas ante la indolencia de las autoridades y la violencia que enfrentan. José Montes, conductor del noticiero El Txoro Matutino y amigo cercano de Figueroa, cuestionó a Sotelo sobre la filtración de información desde la Comisión de Seguridad Pública.
Entre los acuerdos alcanzados se encuentra la creación de una comisión para dar seguimiento a la implementación del protocolo emergente y las gestiones en la Comisión de Atención a Víctimas.