La OTAN se está preparando para una cumbre en Washington donde reafirmará su apoyo a largo plazo a Ucrania, en medio de un aumento de los ataques rusos contra objetivos civiles. Se espera la aprobación de un nuevo paquete de ayuda que incluye equipamiento militar y fortalecimiento de capacidades defensivas.
La OTAN está en las etapas finales de preparación para su cumbre en Washington, donde conmemorará el 75 aniversario de la Alianza con un enfoque renovado en el apoyo a Ucrania, mientras Rusia intensifica sus ataques contra civiles en el país.
Jens Stoltenberg, secretario general de la OTAN, condenó enérgicamente los recientes ataques rusos, incluyendo un devastador bombardeo a un hospital pediátrico en Kiev que resultó en la muerte de al menos 32 personas, entre ellas niños inocentes.
El objetivo principal de la cumbre es consolidar el apoyo continuo a Ucrania, enfatizando su soberanía e independencia frente a la agresión rusa. Los líderes de los 32 aliados están preparados para respaldar un nuevo paquete integral que incluye la modernización de las fuerzas ucranianas, mejoras en la interoperabilidad con la OTAN y un fondo de aproximadamente 40.000 millones de euros para equipamiento militar esencial.
Joe Biden, presidente de EE.UU., será el anfitrión de la ceremonia inaugural, centrada en fortalecer la unidad transatlántica y la determinación de la Alianza frente a los desafíos actuales. La Casa Blanca ha desestimado las preocupaciones sobre la capacidad de Biden para liderar debido a su edad, destacando el entusiasmo de los aliados por las iniciativas conjuntas en la cumbre.
Durante la reunión, se espera la aprobación de una declaración oficial enfocada en la disuasión y defensa, así como en el fortalecimiento de las relaciones con socios estratégicos del Pacífico ante la creciente influencia global de China. También se llevarán a cabo encuentros específicos con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, y otros aliados internacionales para coordinar acciones conjuntas.
La OTAN reafirma su compromiso con una estrategia de defensa integral que aborda desafíos como la migración, la inestabilidad política y las oportunidades de cooperación con países vecinos del sur, subrayando la importancia de la seguridad global en un contexto global dinámico.