La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha lanzado una advertencia sobre el empeoramiento del brote mundial de cólera, atribuido a la intensificación de los efectos del cambio climático. Philippe Barboza, responsable de la OMS contra el cólera, expresó en una conferencia de prensa en la ONU en Ginebra la necesidad urgente de actuar para prevenir la propagación del cólera, especialmente en vista de los pronósticos que anticipan un empeoramiento de la situación.
Desde enero, cuando la OMS clasificó este brote como una emergencia de grado tres, el nivel de alerta más alto, la situación ha continuado deteriorándose. Durante el período entre enero de 2023 y marzo de 2024, se han registrado más de 824,479 casos de cólera y 5,900 muertes asociadas en más de treinta países. El mes pasado, se notificaron 25,424 nuevos casos en 16 países, con cifras particularmente alarmantes en África y el Medio Oriente.
El cambio climático, con sus secuelas de sequías e inundaciones en el este y centro de África, está exacerbando la situación y creando condiciones propicias para la proliferación del cólera en países como Etiopía o Zimbabue. En respuesta a esta crisis, la OMS ha asignado más de 16 millones de dólares a fondos de emergencia para el cólera desde 2022 y ha aprobado una nueva vacuna, la Euvichol-S, con una fórmula más simplificada para aumentar la producción de estos medicamentos.
Sin embargo, la capacidad de la OMS para abordar esta crisis se ve gravemente obstaculizada por la falta de financiación. Philippe Barboza hace un llamado a la acción coordinada e inmediata para hacer frente a esta situación global del cólera, advirtiendo que la falta de intervención pone en riesgo más vidas en los 23 países que actualmente notifican brotes.