- Manifestantes encapuchados ingresaron a la central y realizaron pintas en camiones y accesos.
- Autoridades activaron el “código rojo” y suspendieron operaciones de la terminal.
- Entre 15 mil y 20 mil pasajeros quedaron varados por más de dos horas.
La irrupción en la terminal
El 12 de septiembre, un grupo de encapuchados vinculados con las protestas por los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa ingresó a la Terminal de Autobuses del Norte en la Ciudad de México. Los manifestantes descendieron de un autobús de la línea “Conexión” y comenzaron a realizar pintas en las instalaciones y en unidades de Grupo Estrella Blanca.
Suspensión total de operaciones
Tras el ingreso, el gerente de la central solicitó cerrar accesos y salidas, lo que provocó la detención total de los servicios. De acuerdo con estimaciones preliminares, entre 15 mil y 20 mil pasajeros quedaron varados por más de dos horas, sin poder abordar o salir de la terminal.
Activación del “código rojo”
Ante la protesta, la Secretaría de Seguridad Ciudadana activó el “código rojo” para resguardar a usuarios y personal de la terminal. La movilización también afectó la circulación en vialidades cercanas, como avenida Politécnico Nacional, donde el tránsito quedó prácticamente detenido.
Demandas de los manifestantes
Los normalistas señalaron que su protesta busca presionar por la entrega de vales de apoyo que, afirman, no han recibido. Además, algunos conductores denunciaron que los encapuchados amenazaron con arrojar sustancias a los motores de los camiones para impedir su operación, lo que obligó a suspender el servicio.





