- Netanyahu admite lamento por el ataque de Hamás del 7 de octubre y asume errores en la seguridad.
- El primer ministro israelí asegura que permanecerá en el cargo mientras pueda contribuir a la seguridad de Israel.
- A pesar de las críticas, Netanyahu afirma que la decisión de su permanencia depende del pueblo.
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, expresó su pesar por no haber prevenido el ataque de Hamás del 7 de octubre. En una entrevista con la revista Time, el mandatario lamentó profundamente los eventos y reflexionó sobre si se podrían haber tomado medidas para evitar el ataque, que dejó aproximadamente 1.200 muertos y 251 secuestrados, además de iniciar una guerra de más de 10 meses. A pesar de su pesar, Netanyahu no ha asumido formalmente la responsabilidad por los errores de seguridad que permitieron el ataque.
Netanyahu reconoció que uno de sus principales errores fue ceder a la resistencia de su Gabinete de Seguridad a declarar una guerra abierta contra Hamás. Comentó que la situación del 7 de octubre demostró que la suposición de que Hamás estaba disuadido era errónea. A pesar de las críticas y las demandas de dimisión, el primer ministro afirmó que intentará mantenerse en el poder mientras pueda ayudar a guiar a Israel hacia un futuro de seguridad y prosperidad.
Netanyahu prefiere enfrentar críticas
En la entrevista, Netanyahu declaró que prefiere enfrentar críticas a tener un “buen obituario” y dejó en claro que la decisión sobre su permanencia en el cargo dependerá de si puede liderar al país hacia la victoria y asegurar un entorno de paz y seguridad tras la guerra. La guerra con Hamás ha causado cerca de 40.000 muertes y una crisis humanitaria sin precedentes en la Franja de Gaza.
Hasta el momento, solo tres figuras de alto nivel han dimitido por el ataque: el general Aharon Haliva, el general Avi Rosenfeld y el jefe del Shin Bet para el distrito sur, cuya identidad no se ha revelado. A pesar de la crisis, Netanyahu sigue enfrentando presiones para dimitir, además de estar involucrado en tres casos de corrupción y con manifestaciones crecientes en su contra en todo el país.