- El exgobernador del Banco de Canadá y de Inglaterra Mark Carney reemplazará a Justin Trudeau.
- Su elección llega en un contexto de disputas comerciales con Estados Unidos.
- Canadá enfrenta un auge del nacionalismo tras las declaraciones de Trump.
Mark Carney, economista de 59 años y exgobernador del Banco de Canadá, ha sido elegido como nuevo líder del Partido Liberal, lo que lo convierte en el próximo primer ministro del país. Con un aplastante 85.9 % de los votos, reemplazará a Justin Trudeau, quien renunció en enero pero continuará en el cargo hasta que Carney asuma formalmente en los próximos días.
Su llegada al gobierno ocurre en un momento de gran tensión con Estados Unidos. Las recientes declaraciones del presidente Donald Trump, quien sugirió la anexión de Canadá como el estado número 51, han avivado un sentimiento nacionalista en la población. A esto se suman los aranceles impuestos por la administración estadounidense sobre productos canadienses, una medida que Carney prometió enfrentar con represalias comerciales hasta que Washington trate a Canadá con respeto.

Un economista sin trayectoria política
A pesar de su destacada carrera en el sector financiero, Mark Carney no cuenta con experiencia en cargos públicos. Su gestión en el Banco de Canadá fue clave para la recuperación del país tras la crisis financiera de 2008, y su liderazgo en el Banco de Inglaterra fue ampliamente reconocido.
Su nombramiento ha generado expectativas en un contexto político complejo. La popularidad de Trudeau había disminuido debido al aumento en los precios de alimentos y viviendas, además de la crisis migratoria. Con su salida, los liberales buscan renovar su imagen y fortalecer su posición ante las próximas elecciones parlamentarias, que podrían convocarse en las próximas semanas.
El nacionalismo canadiense ha tomado fuerza ante la postura de Trump. En eventos deportivos, el himno de Estados Unidos ha sido abucheado, mientras que algunos ciudadanos han optado por evitar la compra de productos estadounidenses y reducir sus viajes al país vecino.
Mientras tanto, en Washington, el asesor económico de la Casa Blanca, Kevin Hassett, expresó su esperanza de resolver antes de que termine marzo la disputa con Canadá por el tráfico de fentanilo en la frontera.
Carney se enfrenta ahora a un doble desafío: liderar a su partido en una posible elección anticipada y demostrar que su experiencia económica puede traducirse en una gestión política eficaz para el país.