- Macron convoca elecciones anticipadas tras la derrota en las europeas, generando incertidumbre entre un gobierno de ultraderecha o un parlamento bloqueado.
- Sondeos anticipan tres grandes bloques en la futura Asamblea Nacional, con la extrema derecha liderando las preferencias.
Un giro electoral inesperado
El presidente Emmanuel Macron ha decidido adelantar las elecciones tras la debacle de su partido en los comicios europeos del 9 de junio. Esta medida podría llevar a Francia a un escenario sin precedentes: un gobierno liderado por la ultraderecha o un bloqueo parlamentario difícil de superar.
“El sistema mayoritario de Francia se va a poner a prueba”, señala el profesor universitario Benjamin Morel. Por su parte, Émeric Bréhier, del Observatorio de la Vida Política de la Fundación Jean Jaurès, advierte sobre las dificultades para formar alianzas políticas.
Los sondeos indican que la Asamblea Nacional resultante de la segunda vuelta el 7 de julio podría dividirse en tres bloques principales: la extrema derecha, la alianza de izquierdas y el centro ‘macronista’, con porcentajes que reflejan una polarización significativa.
Escenarios Políticos en Disputa
El escenario más probable es una amplia victoria de la extrema derecha, con predicciones que sugieren una posible mayoría absoluta. Esto podría llevar al joven eurodiputado Jordan Bardella, figura clave en la reciente victoria de su partido en las elecciones europeas, a ser nombrado primer ministro.
“Sería un mensaje negativo para Europa y muchos países del mundo”, comenta el politólogo Jean-Yves Camus, refiriéndose a las posibles políticas de inmigración de un gobierno de extrema derecha.
La alternativa, un gobierno de coalición entre los menos radicales de la alianza de izquierdas y los macronistas, podría ser una opción para evitar un parlamento ingobernable.
En caso de no alcanzar la mayoría absoluta, Francia podría enfrentar un año de parálisis política, con pocas opciones para convocar nuevas elecciones.
Perspectivas de Cambio en Francia
Para enfrentar este escenario, se considera incluso la posibilidad de formar un gobierno técnico liderado por figuras apolíticas, similar a lo experimentado en países como Italia o Bélgica en situaciones anteriores.
En resumen, las elecciones en Francia presentan un panorama desafiante que podría redefinir el futuro político del país en los próximos años.