- Los habitantes de Daca intentan regresar a la normalidad tras la llegada del Nobel Muhammad Yunus al poder interino.
- La falta de presencia policial continúa causando caos, con estudiantes gestionando el tráfico en la capital.
- La toma de poder de Yunus se produce tras semanas de violencia que resultaron en más de 400 muertes.
En el primer día de Muhammad Yunus como nuevo jefe del Gobierno interino en Daca, los residentes se esforzaron por restablecer la normalidad después de semanas de violencia que dejaron más de 400 muertos. Aunque Yunus, el economista y Nobel de la Paz de 84 años, ha asumido el liderazgo, la ausencia de la policía en las calles ha dejado a estudiantes como Sanjit Mahamood, de la Universidad Siddheswari, a cargo de gestionar el caótico tráfico de la capital.
Mahamood, junto con un grupo de estudiantes, ha estado regulando el tráfico en la zona de Banasree desde la mañana, área que anteriormente fue escenario de enfrentamientos violentos entre manifestantes y fuerzas de seguridad, con al menos 15 muertos confirmados. La preocupación por la falta de seguridad es alta, especialmente por la noche, aunque hay un palpable optimismo por el nuevo liderazgo de Yunus.
Seguridad e inicio de las protestas
A pesar del reciente nombramiento de Moinul Islam como nuevo jefe de la Policía en Daca y un ultimátum para que los oficiales se presenten en sus puestos, muchos policías seguían ausentes. Las factorías textiles, cruciales para la economía del país, comienzan a reabrir, pero también enfrentan desafíos por la falta de seguridad.
Las manifestaciones estudiantiles que inicialmente surgieron por un sistema de cuotas injusto se transformaron en un movimiento para derrocar a la ex primera ministra Sheikh Hasina. Su dimisión y huida a India el lunes marcó el fin de un ciclo de violencia que también llevó al fin de su mandato, que había sido marcado por controversias y represión.