Muhammad Yunus, laureado con el Premio Nobel de la Paz en 2006 por su innovador trabajo con microcréditos para combatir la pobreza, ha sido liberado bajo fianza en Bangladesh en relación con nuevas acusaciones de malversación de fondos. El tribunal tomó esta decisión en medio de un proceso legal que ya incluye una condena previa por violaciones laborales.
Las acusaciones actuales se centran en un fondo destinado a los trabajadores de Grameen Telecom, una entidad que posee el 34,2% de Grameenphone, la empresa líder de telefonía celular en Bangladesh y subsidiaria de la compañía noruega Telenor. Se estima que Yunus malversó más de 250 millones de takas, implicando lavado de dinero y privación de ingresos legítimos a los trabajadores.
Yunus, junto con otros siete acusados, ha negado vehementemente estas acusaciones durante la audiencia del domingo. Este evento legal se suma a otro caso donde Yunus fue condenado a seis meses de prisión por violaciones laborales; sin embargo, se le otorgó libertad bajo fianza en esa instancia y actualmente está apelando la sentencia.
El enfrentamiento legal de Yunus ha atraído la atención internacional, con más de 170 líderes mundiales y premios Nobel instando anteriormente a la primera ministra de Bangladesh, Sheikh Hasina, a suspender los juicios contra él. Los partidarios de Yunus sostienen que estas acciones legales son motivadas políticamente debido a las tensiones con Hasina, aunque el gobierno ha refutado estas afirmaciones.