- Jugadores como Malik Nabers, Tua Tagovailoa, Chris Olave y Sammis Reyes siguen enfrentando conmociones cerebrales.
- A pesar de las recomendaciones médicas, algunos, como Tagovailoa, eligen seguir jugando.
- La NFL ha implementado medidas para reducir estos riesgos, pero las conmociones siguen siendo una amenaza en el deporte.
Las conmociones cerebrales continúan siendo una preocupación en la NFL, afectando a jugadores de alto perfil. Malik Nabers, receptor de los New York Giants, sufrió una conmoción el 26 de septiembre. Dos semanas después, Nabers admitió que no recordaba la jugada que le causó el golpe. A pesar de esto, aseguró que su amor por el fútbol sigue siendo fuerte y que está dispuesto a seguir jugando.
Tua Tagovailoa, mariscal de campo de los Miami Dolphins, ha sufrido cuatro conmociones desde 2022. A pesar de las advertencias médicas para que ponga fin a su carrera, Tagovailoa ha decidido seguir en el campo, afirmando que el riesgo vale la pena debido a su pasión por el deporte.
Otros jugadores también han sido afectados. Chris Olave, receptor de los New Orleans Saints, ha sufrido cinco conmociones en sus 24 años de vida. La más reciente fue el 3 de noviembre, pero Olave no considera retirarse, aunque está buscando una segunda opinión médica. En contraste, Sammis Reyes, quien jugó para los Washington Football Team y los Bears, se retiró en 2023 después de sufrir una conmoción durante la pretemporada. Reyes, tras no poder dormir por varios días debido a los síntomas, decidió que su salud era más importante que continuar en la NFL.
Desde 2015, la NFL ha implementado medidas para reducir el riesgo de conmociones, como nuevos cascos y ajustes en las reglas. Aunque en 2023 se registró una disminución en las conmociones en comparación con años anteriores, la liga sigue enfrentando el desafío de proteger a sus jugadores de los peligros de estas lesiones. Las conmociones siguen siendo un problema difícil de erradicar, a pesar de los avances tecnológicos y las modificaciones en las normativas del juego.