La selección mexicana de fútbol está notando una disminución en la asistencia de aficionados debido a los malos resultados en torneos recientes. Esta situación ha llevado a los dirigentes del fútbol a buscar maneras de volver a conectar con los seguidores del equipo.
Este martes, la selección mexicana llevó a cabo una práctica abierta donde cientos de aficionados pudieron ver cómo se preparan para los partidos amistosos contra el Valencia de España y Estados Unidos.
Durante la última fecha FIFA, los encuentros en el Rose Bowl de Pasadena y el AT&T de Arlington, Texas, contaron con asistencias de 25,271 y 32,623 personas, cifras inusuales para el equipo en tiempos recientes. Además, las ventas de entradas para el partido del próximo sábado contra el Valencia en el estadio Cuauhtémoc de Puebla han sido bajas, aunque se espera un aumento.
El entrenador Javier Aguirre tiene previsto realizar otra práctica abierta en Puebla el próximo domingo, un día después del partido contra el Valencia. “Queremos reconectar con nuestros aficionados”, afirmó el defensa César Montes. “Debemos demostrarlo en el campo, y estos partidos son importantes para ello”.
México tuvo un mal desempeño en el Mundial de Qatar 2022, quedando fuera en la fase de grupos por primera vez desde 1978. A 18 meses de ese fracaso, el equipo volvió a fallar en la fase de grupos de la Copa América.
Desde la salida del argentino Gerardo Martino en 2022, han pasado tres entrenadores por el banquillo, siendo Aguirre el último en intentar rescatar al equipo. En su primer mes, logró una victoria ante Nueva Zelanda y un empate contra Canadá. Montes comentó: “Se nota la influencia de Javier Aguirre desde los primeros partidos. Él exige mucha intensidad y concentración, y eso se ha visto reflejado”.
Este sábado, México se enfrentará a un Valencia que ocupa la parte baja de la Liga española y que llegará con varias ausencias debido a las convocatorias internacionales. Montes añadió que jugar contra un club puede ser complicado, pero deben afrontarlo de la mejor manera posible.
Durante la práctica, los jugadores se tomaron un momento para acercarse a los aficionados y repartir obsequios como agradecimiento por su apoyo. Este gesto representa un esfuerzo del equipo por recuperar la conexión con sus seguidores en estos tiempos difíciles.