- La canciller mexicana plantea una “ceremonia de desagravio” como posible solución.
- La controversia se origina por la no invitación del rey Felipe VI a la toma de posesión.
- Se exige el reconocimiento a los pueblos indígenas en las negociaciones diplomáticas.
La canciller de México, Alicia Bárcena, ha afirmado que la restauración de las relaciones con España depende de una “ceremonia de desagravio”, en medio de un impasse diplomático tras la ausencia del rey Felipe VI en la toma de posesión de Claudia Sheinbaum. En declaraciones realizadas en la ONU, Bárcena subrayó que este asunto no es reciente, ya que se relaciona con una carta que el presidente Andrés Manuel López Obrador envió a España en 2019, solicitando una reunión y el reconocimiento de los pueblos indígenas de México.
Durante su rueda de prensa, Bárcena destacó la necesidad de negociar una ceremonia que aborde las tensiones actuales. La situación se agrava por la decisión del gobierno español de no asistir a la ceremonia de transferencia de poder que tendrá lugar el 1 de octubre, lo que marca otro desencuentro en la relación bilateral.
Este episodio se suma a un historial de tensiones entre ambos países a lo largo del mandato de López Obrador, que está a punto de concluir. La no invitación al rey ha acentuado las fricciones diplomáticas, resaltando las diferencias en la percepción y el respeto mutuo en el ámbito internacional.