Una jueza del Tribunal de Enjuiciamiento del Circuito Judicial de la Mixteca decidió que Juan Antonio Vera Carrizal y otros dos acusados por atacar con ácido a la saxofonista María Elena Ríos deben permanecer en prisión preventiva.
Estas personas están recluidas en el penal de San Francisco Tanivet, en Tlacolula de Matamoros. Aunque un juez del Tribunal de Oaxaca había autorizado su liberación este lunes, la Fiscalía General del Estado apeló la decisión. La apelación busca asegurar justicia para la activista María Elena Ríos y la reparación del daño causado.
La Fiscalía indicó que presentó todas las pruebas necesarias, incluyendo testimonios y un expediente extenso, pero el juez José Gabriel Ramírez Montaño emitió una sentencia absolutoria. Según la Fiscalía, esto demuestra que el proceso careció de perspectiva de género.
El mismo día, María Elena Ríos expresó en redes sociales su frustración ante la posible liberación de su agresor, afirmando que “la corrupción ganó”. “Juan Antonio Vera Carrizal quedó libre. Solo le tomó 20 minutos a este juez corrupto decidirlo. Esto es Oaxaca, esto es México, esta es la impunidad que enfrentamos las mujeres que buscamos justicia”, escribió en su cuenta de X.
El gobernador de Oaxaca, Salomón Jara Cruz, también criticó la absolución de Vera Carrizal en redes sociales. “La liberación de Juan Antonio Vera Carrizal es una muestra más de la corrupción en el Poder Judicial. Condeno este fallo, que lastima a la justicia y a todas las víctimas de la violencia feminicida. Es hora de reformar el Poder Judicial para que en Oaxaca no haya más impunidad”, declaró.
María Elena Ríos fue atacada con ácido sulfúrico el 9 de septiembre de 2019 en Huajuapan de León, Oaxaca. El ataque le provocó graves quemaduras, obligándola a someterse a numerosas cirugías y tratamientos médicos.