José Raúl Mulino, candidato presidencial emergente de Panamá respaldado por el exmandatario Ricardo Martinelli.
Ha surgido como una figura destacada en la contienda electoral del país centroamericano. Con menos de dos meses en la boleta electoral, Mulino, un abogado y exministro de Seguridad en Panamá, lidera las encuestas.
Prometiendo un retorno a la bonanza económica y la detención de la migración irregular.
Mulino fue seleccionado como candidato presidencial después de que Martinelli, popular pero inhabilitado por cargos de corrupción, fuera excluido de la contienda. Su cercanía con Martinelli, a quien considera un luchador y defensor de los intereses panameños, ha sido una característica destacada de su campaña.
A pesar de las críticas por su historial de represión policial durante su mandato como ministro de Seguridad, Mulino ha centrado su campaña en promesas de generación de empleo y retorno a la prosperidad económica, que caracterizó la gestión de Martinelli. Sin embargo, algunos cuestionan su capacidad para abordar los problemas actuales del país, como la corrupción y la migración irregular.
La campaña de Mulino ha sido marcada por controversias legales, incluida una demanda de inconstitucionalidad presentada contra su candidatura. A pesar de esto, su popularidad parece haber crecido, aprovechando el descontento generalizado con la clase política del país.
Aunque Mulino lidera las encuestas, enfrenta una competencia reñida de candidatos como Martín Torrijos y Ricardo Lombana, quienes también buscan el apoyo del electorado panameño.
Con el día de las elecciones cada vez más cerca, la incertidumbre rodea el futuro político de Panamá y el papel que desempeñará José Raúl Mulino en él.
