Israel llevó a cabo un nuevo ataque aéreo en los suburbios del sur de Beirut este domingo, apenas 24 horas después de confirmar la muerte de Hassan Nasrallah, líder del grupo Hezbollah, en un bombardeo anterior en la capital libanesa.
Según un comunicado del Ejército israelí, “se realizó un ataque preciso en la zona de Dahye, en Beirut”. No se dieron más detalles en ese momento.
Por su parte, la Agencia Nacional de Noticias del Líbano informó que el ataque ocurrió en el área de Ghobeiry, apuntando a un apartamento residencial. Testigos en la zona escucharon una fuerte explosión y vieron humo. Las ambulancias se desplazaron rápidamente al lugar del incidente.
Además de la muerte de Nasrallah, Israel anunció este domingo que Nabil Qaouk, otro alto cargo de Hezbollah, falleció en un ataque nocturno en Dahye. Este bombardeo forma parte de una serie de ataques casi diarios en la región desde el inicio de la semana. Con la eliminación de Nasrallah y otros mandos importantes, Israel ha asestado un duro golpe a la organización chií respaldada por Irán.
El pasado viernes por la noche, un ataque israelí en la misma zona terminó con la vida de Nasrallah, quien lideró Hezbollah por más de 30 años. En ese ataque también murió el comandante Ali Karaki, según confirmó el grupo en un comunicado oficial. Karaki había sobrevivido a un bombardeo días antes en la misma área.
Las Fuerzas Armadas israelíes indicaron que al menos 20 terroristas más murieron en el ataque que acabó con Nasrallah. “En un ataque preciso llevado a cabo por aviones de combate y dirigido por inteligencia militar, se eliminaron a Hassan Nasrallah y Ali Karaki, comandante del Frente Sur”, señala el comunicado israelí. Otros miembros de Hezbollah también fallecieron en un cuartel subterráneo utilizado para planear operaciones contra Israel.
Este domingo, Israel continuó sus ataques sobre el sur y el este del Líbano, golpeando infraestructura militar de Hezbollah. Según el ejército, las operaciones están dirigidas a destruir las capacidades militares del grupo en el país.
El ministro de Exteriores de Líbano denunció que los bombardeos israelíes ya han causado más de mil muertos y desplazado a decenas de miles de personas, cifra que podría llegar al millón, según reportó la cadena Al Jazeera.
En su primera declaración tras la muerte de Nasrallah, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, aseguró que aunque han logrado grandes avances, “el trabajo aún no ha terminado”. Agregó que Israel enfrentará importantes desafíos en los próximos días y se mostró confiado en superarlos.