En Río de Janeiro, la reunión de ministros de Exteriores del G20 inició con un llamado a la paz y la cooperación pronunciado por el canciller brasileño, Mauro Vieira. En su discurso inaugural, Vieira resaltó la necesidad crítica de la paz y la cooperación para abordar los desafíos actuales, incluyendo la lucha contra la pobreza, la desigualdad y la preservación del medioambiente.
“Sin paz y cooperación, será muy difícil alcanzar la prometida movilización de recursos para enfrentar los desafíos actuales”, señaló el canciller brasileño. Destacó la profunda preocupación de Brasil por la situación internacional en materia de paz y seguridad, subrayando el papel fundamental que el G20 puede desempeñar en la reducción de tensiones internacionales.
Vieira también señaló la inadecuación de los organismos multilaterales para enfrentar los desafíos actuales, haciendo referencia a la “inaceptable parálisis” del Consejo de Seguridad en relación con los conflictos en Rusia. Afirmó que, aunque la ONU fue creada como la organización principal para lidiar con asuntos de paz y seguridad, el G20, concebido para tratar asuntos económicos y financieros, puede jugar un papel crucial en momentos de conflictos.
El canciller brasileño defendió que el G20, como el foro más importante donde países con visiones opuestas pueden dialogar, impulse la discusión sobre conflictos internacionales. Destacó que Brasil no acepta que se recurra a las armas para resolver tensiones y subrayó la necesidad de canalizar los recursos destinados a gastos militares hacia la ayuda a países pobres y la lucha contra los cambios climáticos.
La reunión de ministros del G20, de dos días de duración, se espera que aborde temas cruciales de la coyuntura global, con especial atención a los conflictos en la Franja de Gaza y Ucrania. La agenda del segundo día se centrará en la reforma de organismos multilaterales, un tema impulsado por Brasil durante su presidencia del G20.