- El iceberg A23a, el más grande del mundo, quedó en movimiento tras estar varado durante más de 30 años.
- Su desprendimiento está asociado al cambio climático y el deshielo acelerado de los polos.
- Se espera que su viaje hacia el norte lo lleve a la isla subantártica de Georgia del Sur, donde podría desintegrarse.
- Los científicos consideran que el iceberg podría beneficiar al ecosistema marino al liberar nutrientes en su ruta.
El iceberg A23a, con un peso aproximado de un billón de toneladas y el doble del tamaño de Londres, comenzó a desplazarse por el Océano Austral después de más de tres décadas inmóvil en el mar de Weddell.
Origen y trayectoria
- Desprendimiento inicial: El iceberg se separó de la plataforma de hielo Filchner, en la Antártida, en 1986.
- Situación previa: Permaneció varado en el fondo marino hasta 2020, cuando inició un lento movimiento hacia el norte.
- Fenómeno de retención: En febrero pasado quedó atrapado en una columna de Taylor, que lo mantuvo girando en el mismo lugar.
- Estado actual: Nuevas imágenes satelitales confirman que el iceberg está libre y moviéndose hacia el norte, impulsado por la Corriente Circumpolar Antártica.
Impacto ambiental
Los expertos del British Antarctic Survey (BAS) indican que su llegada a la isla subantártica de Georgia del Sur, con temperaturas más cálidas, provocará su desintegración. Este proceso podría tener un impacto positivo al liberar nutrientes en las aguas, fomentando el desarrollo de ecosistemas marinos prósperos en regiones normalmente menos productivas.
Contexto climático
El caso del A23a resalta los efectos del cambio climático, que acelera el deshielo polar y provoca la formación de enormes icebergs. Científicos advierten que fenómenos similares podrían ser cada vez más frecuentes en el futuro.