El dolor se hace presente en Ensenada con el hallazgo de tres cuerpos, que presumiblemente pertenecen a los dos hermanos australianos y al estadounidense desaparecidos. Un equipo de bomberos encontró los cadáveres en un acantilado en la delegación de Maneadero, en un área de difícil acceso. Ellos intervinieron para la recuperación de los cuerpos.

A pesar del hermetismo oficial de la Fiscalía General del Estado, personal especializado ha trabajado en el área desde temprano para recuperar los cuerpos. Aunque aún no se ha proporcionado información oficial, empleados de la fiscalía y autoridades locales han compartido detalles extraoficiales sobre el hallazgo.
La gobernadora Marina del Pilar Ávila emitió una declaración condenando estos trágicos sucesos y solicitando a la fiscalía una investigación expedita para encontrar a los jóvenes desaparecidos y llevar a los responsables ante la justicia.
La fiscal de Baja California, María Elena Andrade, reveló anteriormente que las autoridades detuvieron a dos hombres y una mujer en relación con el caso. A uno de ellos se le encontró el teléfono celular de una de las víctimas, lo que llevó a su detención. Durante las labores de búsqueda, se descubrieron las casas de campaña donde se alojaron los jóvenes, así como rastros de sangre y piezas dentales.
Las víctimas, identificadas como Jake y Callum Robinson de Australia, y Carter Rhoad de Estados Unidos, llegaron a Ensenada el 26 de abril para disfrutar de actividades al aire libre, pero perdieron contacto con sus familias después de pasar por el pueblo de Santo Tomas.