Millones de personas se reunieron a lo largo de una estrecha línea desde México hasta Canadá y Estados Unidos para presenciar un eclipse total de sol, a pesar de las previsiones de nubes que podrían estropear la vista.
El mejor tiempo para ver el eclipse se esperaba en Vermont, Maine, New Brunswick y Terranova.
Este eclipse total de sol podría ser el que más personas ha congregado en Norteamérica, gracias a la densidad de población en la zona de visibilidad y al atractivo de más de cuatro minutos de oscuridad en pleno día en Texas y otros lugares.
Casi todo el continente podría disfrutar al menos de un eclipse parcial, si las condiciones meteorológicas lo permitían.