- El gobierno federal busca suspender la Licitación IFT-12, programada para enero de 2025.
- Altán Redes, con apoyo gubernamental, podría beneficiarse del espectro en disputa.
- La medida polariza a empresas y autoridades en torno al desarrollo de redes 5G en el país.
La presidenta Claudia Sheinbaum anunció acciones para detener la Licitación IFT-12, el primer concurso de espectro radioeléctrico para servicios 5G en México. El proceso, que debería iniciar formalmente el 27 de enero de 2025, enfrenta ahora una posible cancelación tras casi seis años de planificación.
Movimientos del gobierno
El gobierno federal propone dos medidas principales:
- Solicitar al pleno del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) la suspensión del proceso.
- Promover una medida legal a través de la Consejería Jurídica de la Presidencia para invalidar la licitación en un plazo de dos semanas.
Sheinbaum argumentó que la licitación “no se puede permitir”, señalando que el IFT, como órgano regulador, ha sido extinguido como parte de la reforma de simplificación administrativa, lo que limita su autoridad para llevar a cabo subastas.
Contexto de la subasta
La Licitación IFT-12 incluye 2,223 lotes de frecuencias para servicios 4G y 5G con alcance nacional, regional y local. Entre las bandas disponibles se encuentra la codiciada 2.5 GHz, ideal para desarrollar redes 5G, lo que ha generado interés por parte de operadores como Telcel, AT&T y Altán Redes.
Altán Redes, una empresa público-privada en la que el gobierno mexicano es accionista mayoritario, buscaba acceder a esta banda mediante un régimen especial sin competir en licitación pública. Sin embargo, el IFT decidió incluir estas frecuencias en la subasta, obligando a Altán a competir con otros interesados.
Impacto y reacciones
La medida ha generado tensiones entre autoridades y empresas del sector. Mientras que Telcel y AT&T ven la licitación como una oportunidad para reforzar sus redes, Altán enfrenta desafíos financieros que podrían dificultar su participación efectiva en la subasta.
El IFT aún no ha emitido una postura oficial, pero se espera que su pleno discuta el tema en su primera sesión de 2025, programada para el 10 de enero.