- La Franja de Gaza está en ruinas tras la ofensiva israelí.
- Más de 41.000 personas han muerto, incluidos muchos niños y mujeres.
- La reconstrucción enfrentará grandes desafíos y podría demorar años.
La Franja de Gaza se encuentra en una situación crítica. Edificios han sido destruidos y el agua está contaminada, lo que causa enfermedades. Las calles están cubiertas de escombros y el olor es insoportable por los cuerpos no recuperados.
La guerra entre Israel y Hamás, que comenzó el 7 de octubre del año pasado, ha sido devastadora. Israel afirma que Hamás ha escondido su infraestructura militar en áreas densamente pobladas. Como resultado, cerca de un cuarto de los edificios de Gaza están destruidos o gravemente dañados, y más del 66% ha sufrido al menos algún daño.
La ONU estima que la guerra ha causado la destrucción de 40 millones de toneladas de escombros, suficiente para llenar el Central Park de Nueva York a una profundidad de ocho metros. Limpiar esta situación podría tardar hasta 15 años y costar unos 650 millones de dólares.
Casi 2,3 millones de personas viven en Gaza, y el 90% ha sido desplazado. Muchos están viviendo en campamentos de tiendas, donde no hay electricidad, agua corriente ni servicios básicos. La situación de pobreza es extrema y el desempleo ha alcanzado el 80%.
Desafíos para la reconstrucción
Gaza enfrenta muchos obstáculos para reconstruirse. Las plantas de agua y saneamiento han sido destruidas o dañadas. Además, la falta de combustible ha dificultado el funcionamiento de las pocas instalaciones que aún operan.
Los países ricos del mundo árabe, como Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos, están dispuestos a ayudar en la reconstrucción, pero solo si hay un camino hacia un estado palestino. Sin embargo, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha descartado esta opción y ha indicado que Israel mantendrá el control de seguridad en Gaza.
La reconstrucción requiere importar materiales de construcción, lo que depende de la aprobación de Israel. Además, las disputas internas entre los grupos palestinos complican aún más la situación.
Las personas en Gaza viven con miedo de que otra guerra ocurra y luchan por sobrevivir cada día. “No hay solución”, dice Shifaa Hejjo, quien ha perdido su hogar y vive con sus hijos. “No sabemos si vamos a sobrevivir mañana”.