Un tribunal federal en Nueva York emitió hoy un veredicto declarando al expresidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, culpable de narcotráfico y tráfico de armas.
La decisión del jurado, anunciada luego de dos días de deliberaciones, establece que Hernández, de 55 años, es responsable de los tres cargos presentados por la fiscalía en su contra.
Hernández expresó brevemente su creencia en su inocencia al abandonar la corte, dirigiendo sus palabras a sus familiares y partidarios presentes en la sala. Sin embargo, el veredicto del jurado reflejó una conclusión unánime respecto a su culpabilidad en los delitos imputados.
La fiscalía argumentó durante el juicio que Hernández había facilitado y protegido el tráfico de drogas a gran escala durante su mandato presidencial (2014-2022), colaborando con redes criminales para enviar más de 500 toneladas de cocaína hacia Estados Unidos. Se alega que Hernández recibió millones de dólares en sobornos de cárteles de la droga, incluido el famoso narcotraficante mexicano Joaquín “Chapo” Guzmán.
La sentencia para Hernández se determinará en las próximas semanas o meses, con la posibilidad de enfrentar una cadena perpetua por sus crímenes. Este veredicto marca un hito en la historia judicial de Honduras y podría tener amplias implicaciones en la política y el sistema de justicia del país centroamericano.
El caso de Hernández es solo uno de varios en los que altos funcionarios hondureños están involucrados en actividades relacionadas con el narcotráfico. Otros individuos cercanos al expresidente, incluidos exmiembros de las fuerzas de seguridad, han sido condenados por delitos similares en los últimos años.