El expresidente Evo Morales y sus seguidores del Movimiento al Socialismo (MAS) anunciaron bloqueos de carreteras para asegurar su candidatura en las elecciones de 2025. La reunión, que se realizó en Villa Tunari, pasó de ser un congreso para renovar la directiva del MAS a un “ampliado nacional” para presionar al gobierno y al Tribunal Supremo Electoral (TSE) para que respeten la candidatura de Morales.
Morales confirmó que está “habilitado legalmente” para ser candidato en 2025, aunque su candidatura aún no ha sido reconocida oficialmente por el TSE. La decisión se tomó en un congreso del MAS en 2023, que no fue validado por el TSE.
Los sindicalistas leales a Morales, como Ramiro Cucho y Ponciano Santos, expresaron su descontento por la falta de supervisión del congreso por parte del TSE. Anunciaron que defenderán la candidatura de Morales bloqueando carreteras y criticaron al presidente Luis Arce.
El TSE argumentó que el congreso del MAS no cumplió con el requisito de consenso entre las facciones del partido. Esta falta de consenso llevó a la anulación del congreso de 2023, donde Morales fue ratificado como presidente del partido y candidato para 2025.
Arce y el vicepresidente David Choquehuanca no asistieron a la reunión de Morales, alegando que las organizaciones sociales no estaban adecuadamente representadas. Además, el TSE también rechazó un congreso celebrado en mayo por la facción ‘arcista’, en el que Grover García fue elegido presidente del MAS, por no cumplir con los requisitos del partido.
El MAS ha recibido una advertencia del TSE por no renovar su directiva y podría perder su personalidad jurídica si recibe una tercera amonestación.
El distanciamiento entre Morales y Arce desde finales de 2021 sigue generando tensiones. Morales y sus seguidores consideran que la suspensión de las elecciones primarias es un intento del Gobierno para frenar su candidatura.