La ministra española de Juventud e Infancia, Sira Rego, anunció hoy que el Gobierno está considerando la posibilidad de bajar la edad mínima para votar en España a los 16 años, siguiendo el ejemplo de otros países de la Unión Europea.
Esta medida se enmarca en un esfuerzo por motivar a los jóvenes a participar en las elecciones europeas, donde se espera que el 64 % de ellos ejerza su derecho al voto.
Durante un encuentro de ministros europeos de Educación y Juventud en Bruselas, se debatió la importancia del voto joven en las próximas elecciones del 6 al 9 de junio.
Sira Rego destacó la necesidad de fomentar la participación juvenil en la vida política, considerándola como un pilar fundamental para fortalecer la democracia.
La ministra mencionó ejemplos como Austria, donde los adolescentes pueden votar desde los 16 años, y resaltó una mayor participación política entre los jóvenes en países con una edad de voto más temprana
España se encuentra en proceso de evaluar esta posibilidad, iniciando un debate público que involucre a la juventud.
El adelanto de la edad de voto a los 16 años requeriría una reforma de la ley electoral española. Sin embargo, esta medida se considera importante para garantizar una mayor representatividad y participación de los jóvenes en los procesos electorales.
En las elecciones europeas anteriores, celebradas en 2019, se observó un aumento en la participación juvenil, con un incremento del 50,6 % en comparación con el 42,6 % en 2014. Este aumento se atribuyó en gran medida a una mayor participación de los jóvenes.
El Eurobarómetro reciente revela que el 64 % de los jóvenes europeos planea votar en las próximas elecciones, mostrando un alto nivel de compromiso cívico entre la juventud.
Además, muchos jóvenes están activos en temas políticos y sociales, participando en organizaciones y movimientos para impulsar el cambio.
La encuesta también destaca que la mayoría de los jóvenes europeos considera que la Unión Europea tiene un impacto significativo en su vida diaria, reflejando un sentido de identidad europea entre la juventud del continente.
En resumen, el debate sobre el adelanto de la edad de voto a los 16 años en España es un reflejo del compromiso del Gobierno con la participación ciudadana y el fortalecimiento de la democracia, reconociendo el papel fundamental que desempeñan los jóvenes en la construcción del futuro de Europa.