- El nuevo primer ministro británico busca fortalecer la cooperación europea en una cumbre clave.
- Starmer destaca la urgencia de renovar la confianza para abordar desafíos como la seguridad y la inmigración.
Keir Starmer, recién nombrado primer ministro del Reino Unido, proclamó este jueves en la inauguración de la cumbre de la Comunidad Política Europea (CPE) un “reinicio” en las relaciones entre su país y la Unión Europea bajo el Gobierno laborista. Reuniéndose en el palacio de Blenheim, al noroeste de Londres, Starmer enfatizó que la cooperación entre el Reino Unido y la UE es crucial para enfrentar los desafíos actuales.
El primer ministro británico destacó la necesidad de trabajar en conjunto frente a amenazas como la agresión rusa, subrayando el apoyo continuo a Ucrania en su lucha por la seguridad europea. Starmer elogió el liderazgo del presidente Volodímir Zelenski y prometió solidaridad en la defensa contra los ciberataques y otras formas de agresión.
Además, Starmer propuso buscar nuevas formas de colaboración más ambiciosas entre los países miembros de la CPE, enfatizando una visión pragmática y no ideológica para enfrentar los retos del presente.
El primer ministro también abordó la crisis migratoria, calificándola no solo como un desafío sino como una verdadera crisis humanitaria. Alertó sobre las redes criminales que explotan la desesperación humana y afirmó que la desigualdad global es un factor fundamental detrás del fenómeno migratorio.
En esta reunión crucial, Starmer se comprometió a fortalecer alianzas existentes y a construir nuevas, señalando la importancia de una respuesta unificada ante los problemas que afectan a Europa y más allá.
