La tormenta tropical Pamela avanzaba tierra adentro el miércoles por la región noroeste de México después de haber tocado tierra como huracán al norte del puerto de Mazatlán.
Autoridades de Protección Civil del estado de Sinaloa, donde se sitúa Mazatlán, informaron que los vientos y lluvias de Pamela causaron pocos daños en la ciudad, que también es un destino turístico.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos dijo que los vientos de Pamela habían disminuido a cerca de 75 km/h (45 mph) para al mediodía mientras se movía tierra adentro. El ojo de la tormenta se ubicaba a 270 kilómetros (170 millas) al noreste de Mazatlán y se movía con dirección noreste a 40 km/h (25 mph).
El centro de huracanes advirtió de la posibilidad de inundaciones repentinas en las zonas afectadas.
Se pronostica que los remanentes de Pamela se debiliten mientras cruzan el norte de México y se espera que se disipen al final del día antes de llegar a la frontera con Texas.
Con información de AP