- El Ejército de Corea del Sur se declara listo para responder a provocaciones norcoreanas.
- Pyongyang alerta sobre un posible conflicto armado tras vuelos de drones surcoreanos.
- La tensión aumenta tras la advertencia de Kim Yo-jong sobre “consecuencias graves”.
Corea del Norte ha emitido una amenaza de abrir fuego en la frontera con Corea del Sur, tras recibir órdenes del alto mando militar para que sus unidades de artillería se preparen ante la posibilidad de infiltraciones de drones surcoreanos. Un portavoz del Estado Mayor General norcoreano anunció el 12 de octubre que estas brigadas están en “modo de guerra” y se han reforzado las posiciones de vigilancia antiaérea en la capital, Pyongyang. La escalada de tensiones surge en un contexto de vuelos recientes de drones surcoreanos sobre el espacio aéreo norcoreano.
Kim Yo-jong, hermana del líder norcoreano Kim Jong-un, advirtió que el Sur enfrentará un “horrible desastre” si continúa enviando drones a su territorio, considerándolo un “desafío imperdonable” a la soberanía de su país. Este mensaje llega en respuesta a la acusación de que drones surcoreanos han sobrevolado Pyongyang en varias ocasiones para lanzar propaganda. Sin embargo, no está claro si estos drones provienen del Ejército surcoreano o de activistas de derechos humanos que operan en la región.
Tensión en aumento en la frontera
La situación se complica aún más con la decisión de Corea del Norte de cortar y fortificar las vías de comunicación con el Sur, en un movimiento que parece alinearse con una reciente enmienda constitucional que redefine las fronteras nacionales. Kim Jong-un ha designado a Corea del Sur como el principal enemigo de su régimen, aumentando las hostilidades entre ambos países.
Frente a estas tensiones, el Ejército de Corea del Sur reafirmó su preparación para cualquier eventualidad. Lee Seong-joon, portavoz del Estado Mayor Conjunto surcoreano, aseguró que las fuerzas armadas están monitoreando la situación y están completamente preparadas para posibles provocaciones. El ministro de Defensa surcoreano negó cualquier conocimiento sobre los supuestos envíos de drones al Norte, mientras el JCS descalificó las acusaciones de Pyongyang como “desvergonzadas”.