Dos meses y medio después de que el exvicepresidente de Ecuador, Jorge Glas, se refugiara en la embajada de México en Quito, el Ministerio de Relaciones Exteriores ecuatoriano ha enviado una carta a la delegación diplomática mexicana solicitando autorización para que la fuerza pública ingrese y proceda a su captura. Glas es buscado por la Justicia ecuatoriana por su supuesta participación en un caso de peculado, del cual él asegura ser inocente.
En el comunicado, la Cancillería ecuatoriana especifica que “solicita el consentimiento del jefe de la misión diplomática mexicana para que las fuerzas del orden, dependientes del Ministerio del Interior, ingresen a los locales de la misión y lleven a cabo la captura del señor Jorge David Glas Espinel, dispuesta por la Corte Nacional de Justicia del Ecuador.”
La embajada de México en Ecuador, donde Glas se encuentra como huésped desde diciembre pasado, está bajo custodia policial desde que se hizo pública su presencia en el lugar.
En diciembre, la Cancillería mexicana confirmó que Glas ingresó a la delegación diplomática como huésped, expresando temor por su seguridad y libertad personal. La defensa de Glas formalizó el pedido de asilo político el 20 de diciembre.
La solicitud de Ecuador se produce después de que en enero, el juez Luis Rivera dictara prisión preventiva contra Glas por su presunta participación en el caso “Reconstrucción de Manabí”, relacionado con el delito de peculado. La defensa de Glas ha negado las acusaciones.
Jorge Glas, quien sirvió bajo los mandatos de los expresidentes Rafael Correa y Lenín Moreno, ya fue condenado previamente por asociación ilícita y cohecho agravado en conexión con el caso Odebrecht. Su liberación en noviembre de 2022 fue otorgada mediante un recurso de hábeas corpus, cumpliendo medidas alternativas a la prisión.