- Donald Trump ha señalado un posible fraude electoral en Pensilvania, un estado clave para las elecciones del 5 de noviembre.
- La campaña republicana ha denunciado problemas en el voto anticipado, aumentando las tensiones en la contienda.
- Las afirmaciones de Trump reavivan las disputas sobre la legitimidad electoral desde 2020.
El expresidente Donald Trump ha levantado la voz nuevamente sobre lo que considera un fraude electoral en Pensilvania, un estado esencial en la carrera hacia las elecciones programadas para el 5 de noviembre. En un mensaje en redes sociales, Trump afirmó que se están cometiendo irregularidades significativas, incitando a sus seguidores a reportar las supuestas acciones engañosas de las autoridades.
La campaña de Trump ha denunciado que, en un incidente reciente, una oficina de correos en el condado de Bucks cerró antes de tiempo, impidiendo que muchos votantes anticipados ejercieran su derecho. Este hecho fue calificado como “represivo e intimidante” por parte de sus representantes, quienes afirman que esto podría afectar el resultado de las elecciones.
Además, varios miembros del Partido Republicano han estado compartiendo en redes sociales videos que supuestamente evidencian irregularidades en el voto por correo. Este tipo de acusaciones revive el clima de desconfianza que Trump fomentó tras las elecciones de 2020, cuando rechazó aceptar su derrota y promovió demandas por fraude electoral que no prosperaron en los tribunales.
A medida que se acercan las elecciones, Trump continúa sin reconocer su derrota ante Joe Biden, sosteniendo que solo aceptará los resultados si se garantizan elecciones “justas”. Su insistencia en las irregularidades, junto con los recientes fallos judiciales que favorecen a su campaña, sugieren que las tensiones sobre la legitimidad del proceso electoral seguirán marcando el camino hacia el día de la votación.