- Donald Trump gana con un 42% de los votos en Dearborn, superando a Kamala Harris.
- La comunidad árabe de Míchigan, tradicionalmente demócrata, se aleja del Partido Demócrata debido al apoyo de Biden a Israel.
- La victoria de Trump en Dearborn y otros condados árabes representa una reversión respecto a 2020, cuando Biden dominó la región.
En un giro inesperado, Donald Trump ha ganado de forma clara en Dearborn, la ciudad de Míchigan con la mayor población árabe-estadounidense. En este bastión tradicionalmente demócrata, el republicano obtuvo el 42% de los votos, frente al 36% de Kamala Harris y el 18% de la candidata independiente Jill Stein, según los datos oficiales. La ciudad, donde el 55% de sus residentes tienen ascendencia árabe y que fue gobernada por el primer alcalde árabe-estadounidense, se convirtió en un importante campo de batalla en unas elecciones que estuvieron marcadas por el descontento por la guerra en Gaza.
La victoria de Trump en Dearborn marca un contraste con los resultados de 2020, cuando Joe Biden ganó cómodamente con el 68% de los votos en esta área, mientras que Trump apenas logró el 30%. Este cambio se atribuye principalmente al enfado de la comunidad árabe ante el respaldo de Biden al gobierno israelí, lo que generó una ola de protestas y desconfianza hacia el Partido Demócrata. Este año, una parte significativa de los votantes árabes de Míchigan, tradicionalmente leales a los demócratas, voltearon su apoyo hacia Trump.
Trump gana en Dearborn, sorprendiendo a los demócratas en la ciudad árabe más importante de Míchigan.
En otras ciudades con alta población árabe, como Hamtramck, el voto se distribuyó de forma más equitativa, con Kamala Harris obteniendo el 46% de los votos, frente al 42% de Trump. Sin embargo, la caída en la popularidad de los demócratas en estas áreas fue notable en comparación con 2020, cuando Biden había alcanzado el 85% de los votos en Hamtramck.
Míchigan, uno de los estados clave en las elecciones presidenciales, sigue sin un ganador definitivo, aunque con un 95% de los votos escrutados, Trump lidera por dos puntos, con una diferencia que podría ser decisiva en el resultado final. Además de ganar en Dearborn, Trump también ha obtenido victorias en otros estados bisagra como Georgia, Wisconsin y Carolina del Norte, mientras mantiene una leve ventaja en Arizona y Nevada. La comunidad árabe de Míchigan se consideró crucial durante la campaña, dada su creciente influencia en la política estatal y nacional. Sin embargo, el apoyo a Trump en esta región refleja un cambio en la dinámica política de los “estados bisagra”, que podrían decidir el resultado de estas elecciones presidenciales.