- Debby tocó tierra en Florida esta madrugada, debilitándose a tormenta tropical.
- Las lluvias y las inundaciones continúan siendo una preocupación importante en la región.
- Se prevé que Debby siga su trayectoria hacia Georgia y Carolina del Sur.
Debby, que tocó tierra en Florida esta madrugada como huracán cerca de Steinhatchee, ha perdido fuerza y se ha convertido en una tormenta tropical. Los vientos máximos sostenidos de la tormenta ahora alcanzan los 110 km/h. Según el Centro Nacional de Huracanes (NHC), el ciclón había llegado a la costa como un huracán de categoría 1 en la escala Saffir-Simpson, pero su intensidad ha disminuido a medida que avanza el día.
A pesar de la disminución en la fuerza de los vientos, las lluvias torrenciales y las inundaciones continúan siendo un problema grave. Se espera que las condiciones meteorológicas extremas persistan en Florida y se extiendan a Georgia y Carolina del Sur en las próximas horas. El NHC ha advertido sobre acumulaciones de hasta 762 milímetros de lluvia en algunas áreas del sureste, lo que podría provocar inundaciones severas.
Además, la marejada ciclónica sigue siendo una amenaza significativa. En el noroeste de Florida, el nivel del mar podría elevarse hasta casi dos metros por encima del promedio, aumentando el riesgo de inundaciones costeras. Debby avanza a unos 13 kilómetros por hora en dirección nornoreste, y se anticipa que su velocidad de traslación disminuya en los próximos días.
El presidente Joe Biden ha declarado el estado de emergencia para la mayoría de los condados de Florida y ha autorizado asistencia federal para apoyar los esfuerzos de respuesta estatal. Este es el segundo huracán de la temporada atlántica en impactar Estados Unidos, tras el huracán Beryl que afectó Texas en julio. La temporada de huracanes en el Atlántico, que comenzó el 1 de junio, se prevé como una de las más activas en décadas, con la posibilidad de formar hasta 25 tormentas y 13 huracanes.