- Buscan mejorar la seguridad vial y regular el uso de vehículos eléctricos.
- Las reformas aplicarán a motocicletas y scooters eléctricos con normas específicas.
- Se exigirá registro y uso obligatorio de equipo de seguridad.
El Gobierno de la Ciudad de México trabaja en modificaciones a la Ley de Movilidad y al Reglamento de Tránsito para regular el uso de motocicletas y scooters eléctricos. La Jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, explicó que estas reformas buscan garantizar la seguridad vial, ordenar el tránsito y proteger el medio ambiente.
Crecimiento del uso de vehículos eléctricos
Con más de 750 mil motocicletas de combustión interna circulando en la capital, el aumento de las eléctricas ha generado la necesidad de establecer normas claras. Las nuevas disposiciones señalan que las motocicletas eléctricas, al superar los 25 km/h, deberán portar placas, tarjeta de circulación, luces encendidas y casco obligatorio. Además, no podrán circular por ciclovías, banquetas ni carriles confinados.
Regulación de scooters y patines eléctricos
Los scooters y patines eléctricos serán considerados vehículos no motorizados y deberán circular exclusivamente en ciclovías o, en su ausencia, por el carril derecho de las calles, respetando las reglas de tránsito para su seguridad.
Seguridad vial y medidas preventivas
Durante el tercer trimestre de 2024, se reportaron 19,207 accidentes de tránsito en la CDMX, con una reducción del 10.6 % en comparación con el periodo anterior. No obstante, el 49 % de los fallecidos en estos incidentes eran motociclistas, reflejando la urgencia de reforzar medidas de seguridad.
Modificaciones legales y controles viales
La Consejería Jurídica explicó que se reformarán artículos clave de la Ley de Movilidad para definir con precisión las reglas de motocicletas eléctricas. Además, el programa Fotocívicas se fortalecerá con la instalación de 150 radares para reducir accidentes por exceso de velocidad.
El Secretario de Seguridad Ciudadana, Pablo Vázquez Camacho, enfatizó que la meta de estas medidas no es recaudatoria, sino concientizar a los conductores sobre los riesgos de la velocidad excesiva y salvar vidas.